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El tipo de cambio a $936 en abril de 2025 no es una foto fija, sino el punto de partida de una transición monetaria global. Más que el cobre, la verdadera disrupción para el peso chileno vendrá de la intersección entre las políticas tradicionales y la imparable adopción de activos digitales.
El análisis clásico del dólar se queda corto. Mientras el mercado fija su mirada en el Fed o en la cotización del metal rojo, una revolución silenciosa en las finanzas digitales está reescribiendo las reglas de la liquidez y la soberanía monetaria. Proyectar el USD/CLP para el cierre de 2025 exige un zoom de alto nivel: uno que combine macroeconomía con la velocidad de la innovación blockchain.
- El Dato: En el corte de abril, el dólar operaba en $936, la UF en $39.062 y el euro en $1.060, mostrando una relativa estabilidad en un contexto de altas tasas históricas.
- Por qué importa: Esta «calma tensa encierra la batalla entre la política contractiva del Banco Central de Chile y la presión inflacionaria residual. Cada punto base en la tasa de interés defiende el peso, pero también frena el ecosistema de startups fintech que necesita capital barato para crecer.
- Lo que viene: La variable oculta es la posible aceleración del proyecto de peso digital del Banco Central (CBDC). Una implementación ágil podría fortalecer la moneda local, pero un retraso cedería terreno a las stablecoins dolarizadas, aumentando la presión sobre el tipo de cambio.
El Triángulo del Valor: Cobre, Tasas y Tokens
La narrativa tradicional sigue vigente, pero con capas de complejidad añadidas. Un precio del cobre robusto, impulsado por la transición energética global, sigue inyectando dólares y fortaleciendo el peso. Sin embargo, este flujo ya no es el único determinante. La política de la Reserva Federal estadounidense, ahora más predecible con herramientas de IA, genera menos pánico, pero su efecto en el costodel crédito global es imbatible.
La elección presidencial en Chile siempre es un catalizador de volatilidad. Los mercados digitales, sin embargo, operan con otra lógica. Un escenario regulatorio favorable a la innovación fintech podría atraer capitales de riesgo especulativo en dólares, que se convertirían a pesos para invertir en el hub tecnológico local, generando una demanda insospechada de CLP. La incógnita es si la próxima administración verá las criptoactivos como una amenaza o como una herramienta de inclusión financiera y atracción de inversión.
"La disyuntiva no es entre dólar o peso, sino entre un sistema financiero análogo y uno digital. Quien controle las tuberías de valor digital tendrá una palanca de poder sobre el tipo de cambio que hará palidecer a los ciclos del cobre."
2025: El Año en que las Stablecoins Entraron en la Ecuación
El ciudadano de a pie en Santiago o Concepción ya no solo compra dólares en la casa de cambio. Accede a DAI o USDT a través de apps locales con un clic, buscando refugio en dólares digitales cuando percibe riesgo. Este flujo, aún difícil de medir para las autoridades, es un drenaje constante de confianza hacia el peso y ejerce una presión de fondo sobre el USD/CLP. El Banco Central de Chile lo sabe, y su estrategia de peso digital es la contramedida.
La proyección para el cuarto trimestre de 2025, por tanto, oscila entre dos futuros. Uno donde la CBDC chilena gana tracción, se integra con DeFi regulado y ofrece un ancla digital de confianza, conteniendo al dólar. Otro donde la adopción de stablecoins se masifica más rápido que la oferta estatal, creando una dolarización digital espontánea que empuja el tipo de cambio hacia los $1.000. La velocidad de innovación del estado versus la del mercado es el nuevo indicador líder que todo trader debe seguir. ¿Está Chile construyendo el puente al futuro monetario, o se quedará viendo pasar la ola digital?